En la poca vida vivida que he vivido, formé un 'criterio' (por así decirlo) de lo que sería mi manual de acción en muchas cosas. Independientemente de cuál o cuáles sean esos criterios, me convencí a mí mismo que esa era la manera más adecuada de proceder, tanto social como individualmente.
Uno se va dando a la idea que tiene control sobre su vida y sobre sí mismo. Y estos criterios, se podría decir, fueron mis pilares para logar 'control'. Me los creí a profundidad, en ellos se basaban mis acciones sobre casi todo. Y sí, me funcionaban; con sus defectos y todo, pero funcionaban. Al final, con esta idea de control, de 'buena personalidad', de 'buenos criterios', y esa serie de cosas, uno va adquiriendo una tranquilidad mental (hablando en general). O sea, las cosas salían y bien y había tranquilidad: me sentía bien y tranquilo.
Para ordenar: una serie de experiencias forman un criterio, un criterio sirve de referencia para acciones futuras, las acciones futuras salen 'bien', y uno se siente bien (o al menos satisfecho); se queda la idea de alcanzar un 'logro' a través de ese criterio y se finaliza 'bien y tranquilo'. Pudiendo ser ese logro tanto físico, espiritual, psicológico, sentimental. Lo que sea.
Ahora imaginen lo siguiente:
De golpe, sin esperarlo, alcanzar un 'logro' que no se buscaba, pero que al vivirlo, esporádicamente claro, se llega a un bienestar. Pues en este caso, la situación es permisible porque alcanzar algo bueno sin planearlo siempre cae bien ¿no?. Aunque casi cierta intranquilidad.
Ahora imaginen lo siguiente:
'Uno se siente bien'; pero se da cuenta que las acciones que llevaron al 'logro no esperado' van en contra de los criterios manejados antes; incluso, atentan contra estos. Y entonces hay una sensación de bienestar, pero a la vez, una sensación contradictoria de nudo en el estómago, taquicardia y manos sudorosas (intranquilidad).
Y ahora, hay un lío entre sensación de bienestar y sensación de tranquilidad. Me doy cuenta que realmente no he vivido gran cosa, o al menos aprendido gran cosa. Y de vez en cuando, uno de esos 'descontroles', totalmente aceptables que hay en la vida, adquiere características tan únicas...
¿Qué hace uno ahora? ¿Busca seguir sintiéndose bien a expensas de la tranquilidad o busca sentirse tranquilo a expensas del bienestar?.
Uno se va dando a la idea que tiene control sobre su vida y sobre sí mismo. Y estos criterios, se podría decir, fueron mis pilares para logar 'control'. Me los creí a profundidad, en ellos se basaban mis acciones sobre casi todo. Y sí, me funcionaban; con sus defectos y todo, pero funcionaban. Al final, con esta idea de control, de 'buena personalidad', de 'buenos criterios', y esa serie de cosas, uno va adquiriendo una tranquilidad mental (hablando en general). O sea, las cosas salían y bien y había tranquilidad: me sentía bien y tranquilo.
Para ordenar: una serie de experiencias forman un criterio, un criterio sirve de referencia para acciones futuras, las acciones futuras salen 'bien', y uno se siente bien (o al menos satisfecho); se queda la idea de alcanzar un 'logro' a través de ese criterio y se finaliza 'bien y tranquilo'. Pudiendo ser ese logro tanto físico, espiritual, psicológico, sentimental. Lo que sea.
Ahora imaginen lo siguiente:
De golpe, sin esperarlo, alcanzar un 'logro' que no se buscaba, pero que al vivirlo, esporádicamente claro, se llega a un bienestar. Pues en este caso, la situación es permisible porque alcanzar algo bueno sin planearlo siempre cae bien ¿no?. Aunque casi cierta intranquilidad.
Ahora imaginen lo siguiente:
'Uno se siente bien'; pero se da cuenta que las acciones que llevaron al 'logro no esperado' van en contra de los criterios manejados antes; incluso, atentan contra estos. Y entonces hay una sensación de bienestar, pero a la vez, una sensación contradictoria de nudo en el estómago, taquicardia y manos sudorosas (intranquilidad).
Y ahora, hay un lío entre sensación de bienestar y sensación de tranquilidad. Me doy cuenta que realmente no he vivido gran cosa, o al menos aprendido gran cosa. Y de vez en cuando, uno de esos 'descontroles', totalmente aceptables que hay en la vida, adquiere características tan únicas...
¿Qué hace uno ahora? ¿Busca seguir sintiéndose bien a expensas de la tranquilidad o busca sentirse tranquilo a expensas del bienestar?.
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