jueves, junio 27, 2013

Última mente.

En la poca vida vivida que he vivido, formé un 'criterio' (por así decirlo) de lo que sería mi manual de acción en muchas cosas. Independientemente de cuál o cuáles sean esos criterios, me convencí a mí mismo que esa era la manera más adecuada de proceder, tanto social como individualmente.

Uno se va dando a la idea que tiene control sobre su vida y sobre sí mismo. Y estos criterios, se podría decir, fueron mis pilares para logar 'control'. Me los creí a profundidad, en ellos se basaban mis acciones sobre casi todo. Y sí, me funcionaban; con sus defectos y todo, pero funcionaban. Al final, con esta idea de control, de 'buena personalidad', de 'buenos criterios', y esa serie de cosas, uno va adquiriendo una tranquilidad mental (hablando en general). O sea, las cosas salían y bien y había tranquilidad: me sentía bien y tranquilo.

Para ordenar: una serie de experiencias forman un criterio, un criterio sirve de referencia para acciones futuras, las acciones futuras salen 'bien', y uno se siente bien (o al menos satisfecho); se queda la idea de alcanzar un 'logro' a través de ese criterio y se finaliza 'bien y tranquilo'. Pudiendo ser ese logro tanto físico, espiritual, psicológico, sentimental. Lo que sea.

Ahora imaginen lo siguiente:

De golpe, sin esperarlo, alcanzar un 'logro' que no se buscaba, pero que al vivirlo, esporádicamente claro, se llega a un bienestar. Pues en este caso, la situación es permisible porque alcanzar algo bueno sin planearlo siempre cae bien ¿no?. Aunque casi cierta intranquilidad.

Ahora imaginen lo siguiente:

'Uno se siente bien'; pero se da cuenta que las acciones que llevaron al 'logro no esperado' van en contra de los criterios manejados antes; incluso, atentan contra estos. Y entonces hay una sensación de bienestar, pero a la vez, una sensación contradictoria de nudo en el estómago, taquicardia y manos sudorosas (intranquilidad).

Y ahora, hay un lío entre sensación de bienestar y sensación de tranquilidad. Me doy cuenta que realmente no he vivido gran cosa, o al menos aprendido gran cosa. Y de vez en cuando, uno de esos 'descontroles', totalmente aceptables que hay en la vida, adquiere características tan únicas...

¿Qué hace uno ahora? ¿Busca seguir sintiéndose bien a expensas de la tranquilidad o busca sentirse tranquilo a expensas del bienestar?. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Di algo, o nada.